Rewilding Spain ha desplegado una red de cámaras trampa y transectos en la Dehesa de Solanillos (Mazarete, Guadalajara) para analizar la fauna de la zona y, específicamente, la situación del conejo silvestre, que es presa clave para muchos carnívoros ibéricos y también un valioso ingeniero de los ecosistemas.
Rewilding Spain está realizando transectos de conejo y un muestreo con cámaras trampa de la fauna silvestre que habita en el monte Dehesa de Solanillos (Mazarete, Guadalajara), uno de los últimos lugares del Alto Tajo donde sobrevive el conejo silvestre europeo (Oryctolagus cuniculus). El triple objetivo es conocer la distribución y abundancia del conejo, qué poblaciones hay de especies que compiten con él por el alimento, como la liebre y los cérvidos, y cuáles son las densidades de mamíferos salvajes en general existentes en la zona.
La monitorización que se está llevando sobre el conejo está alineada en metodología y objetivos con el protocolo del proyecto Life de Seguimiento de Poblaciones de Conejo Silvestre a escala de detalle, que se emplea para conocer la abundancia de este herbívoro en zonas de baja densidad. En la Dehesa de Solanillos, el zorro (Vulpes vulpes), el gato montés (Felis silvestris), la garduña (Martes foina) y el jabalí (Sus scrofa) son mamíferos que tienen al conejo entre sus presas.
Por otra parte, se ha desplegado sobre el terreno una red de 60 cámaras trampa, siguiendo los protocolos del consorcio europeo Enetwild y su proyecto de monitorización European Observatory of Wildlife. Estas cámaras de fototrampeo cubren un territorio de 2.800 hectáreas y desde el mes de julio están recopilando unos datos muy valiosos sobre la fauna de la zona que serán analizados a finales de este año.
Más de 20 especies registradas
Acciones de monitorización como esta son fundamentales para conocer tanto el estado actual de las poblaciones de animales en el territorio como su evolución en el tiempo, al establecer una línea base a partir de la cual se podrá medir el impacto de las acciones de renaturalización que se están llevando a cabo con grandes herbívoros y facilitar los procesos de toma de decisiones. Las mediciones se repetirán en los mismos puntos durante los próximos años y esto permitirá conocer los cambios que se producen y los cambios de la vida silvestre en cada uno de ellos.
Los datos recogidos hasta ahora en la Dehesa de Solanillos muestran que este monte es el hábitat de más de veinte especies de mamíferos y aves, entre los que se encuentran especies que son abundantes en todo el Sistema Ibérico Sur, como el ciervo (Cervus elaphus) , el corzo (Capreolus capreolus) o el tejón (Meles meles), pero también otras como el esquivo gato montés (Felis silvestris), una especie cuya presencia está en retroceso en el centro y el sur de la Península Ibérica.
Pastoreo natural con caballos serranos y tauros
La Dehesa de Solanillos es una de las áreas en la que Rewilding Spain está desarrollando acciones de pastoreo natural, en este caso con caballos serranos y tauros, una tarea que tiene como finalidad contribuir a una regeneración más saludable de este monte, arrasado por un gran incendio en el año 2005, haciéndolo más resiliente frente a potenciales nuevos incendios y aumentando su biodiversidad.
El diseño de este trabajo de monitorización y del análisis de datos está liderado por el área de Renaturalización de Rewilding Spain, encabezada por Diego Rodríguez, con el apoyo de estudiantes de diversas áreas de la biología y la conservación. “Con este estudio buscamos tres objetivos principales: conocer cuánto conejo tenemos y dónde sobrevive; conocer la densidad de sus depredadores y competidores para entender dónde es necesario actuar; y tener una base de datos inicial de la fauna silvestre de Solanillos con la que ir comparando en el futuro a medida que los caballos y los tauros hagan su trabajo sobre el paisaje”, explica Diego.
“Toda esta información nos valdrá para diseñar con mejor criterio el plan de recuperación del conejo, con medidas tales como la instalación de vivares (que reducen significativamente la depredación) y puntos de agua. El conejo no es solo la presa clave de numerosos carnívoros ibéricos, es también un ingeniero de ecosistemas que con su actividad crea las condiciones para que muchas otras especies puedan encontrar refugio en las duras condiciones del monte mediterráneo. Su recuperación por tanto es clave para restaurar nuestros ecosistemas”, concluye.